- 1L de Leche Entera*
- 200g de Nata Líquida
- 400g de Azúcar
- 1 cucharada pequeña de Bicarbonato*
- 1 cucharada de Miel
- Esencia de Vainilla
Elaboración:
- Echa en una olla de metal amplia la leche y la nata ponla a cocer a fuego lento.
- Cuando empiece a burbujear añade el azúcar, la miel, el bicarbonato y la esencia de vainilla y remueve bien hasta que se disuelvan.
- Llegado a este punto, tendrás que dejar cocer la mezcla durante unas 2 horas. Es importante que el esté a fuego muy lento y que remuevas de vez en cuando para que el contenido no se pegue.
- Pasadas 90 minutos, la leche habrá adquirido un tono marrón, que irá siendo mayor a medida que siga cociendo.
- Llegado a las dos horas de cocción, el contenido de la olla habrá espesado bastante.
- Cuando adquiera la textura como de Leche condensada retíralo del fuego y déjalo enfriar a temperatura ambiente.
- Mientras se enfría, espesará un poco más. Remuévelo de vez en cuando.
- El último paso es disfrutarlo solo, como relleno de un postre o dulcificando tu café.
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